Esta herramienta puede llegar a ser el último recurso para muchos propietarios que, cansados de recibir advertencias de sus vecinos, molestias nocturnas o simplemente cuando el ladrido se convierte en algo continuo y carente de motivación, deciden recurrir al uso de estos collares.
El perro es un animal social, se comunica con nosotros y con sus congéneres por medio del ladrido u otros sonidos. Cuando el ladrido se convierte en algo obsesivo o carente de justificación, estos collares suponen una ayuda para corregir estos malos hábitos en el perro.
Por norma general, los collares antiladridos son automáticos,y dependiendo del modelo, pueden captar el ladrido por medio de la detección de un sonido (micrófono) o bien por medio de la detección de la vibración de la tráquea del perro al ladrar.
La elección de un sistema de detección u otro, varía dependiendo de las siguientes condiciones:
- Si el perro se encuentra acompañado de mas perros que ladren alrededor o por el contrario está solo.
- El perro está en un recinto cubierto o en uno descubierto, pudiendo estar expuesto a la lluvia, agua..
Al captar el ladrido, el collar emite una corrección que puede ser:
- VIBRACIÓN
- DESCARGA
- SONIDO
- Combinación que alterna las tres anteriores.
La finalidad de estos collares es que el perro evite el ladrido, asociándolo a recibir una respuesta molesta (sonido,vibración o descarga). No todos los perros necesitan recibir una corrección por descarga, todo depende del carácter que tenga, independientemente de la raza que sea.
Por otro lado, teniendo en cuenta la fuente de alimentación podemos distinguir dos tipos:
- Baterías recargables: Este tipo de alimentación es el más cómodo para algunos, ya que no hay que depender de pilas, simplemente ponerlo a cargar y en 3 horas estaría listo para su uso de nuevo. El principal inconveniente de este tipo de alimentación es que las baterías requieren de unas pautas de uso y conservación tales como comprobar periódicamente (una vez al mes) el estado de las mismas al tener el producto almacenado sin usar durante un cierto tiempo o controlar que la batería no se descargue del todo, ya que su voltaje se desequilibraría y su vida útil se vería reducida o simplemente no admitiría carga.
 |
| Este modelo de collar antiladridos (G100) es recargable y sumergible. |
 |
| Este collar antiladridos (G050) lleva pila de 6V y no es resistente al agua. |
Dependiendo del tamaño del perro, tenemos también varias opciones:
- Si el perro es de raza mediana-pequeña, el más adecuado sería nuestro modelo G100 ya que es el más pequeño y ligero, y como consecuencia no le resultaría incómodo llevarlo puesto.
.jpg) |
| Es importante elegir un collar antiladridos acorde al tamaño de nuestro perro. |
- Si el perro es de raza mediana o grande, cualquier modelo le sería válido.
 |
| Para perros de raza mediana-grande, es recomendable cualquier modelo en tamaño. |
El precio de estos productos, varía en función de las características que tengan los mismos, en nuestro catálogo de collares antiladridos tenemos el más básico (modelo G050) a 20 € gastos de envío incluidos, y el más completo (modelo G100) está en 40 € gastos de envío incluidos. Si estás interesado en adquirir uno de estos modelos, puedes consultar características y funcionamiento haciendo click aquí.
Existen otro tipo de collares antiladridos, que no aplican ninguna de las correcciones anteriormente citadas. Son los collares antiladridos con citronella o similar, que al captar el ladrido del perro, activan un dispositivo que pulveriza una substancia desagradable para el olfato de nuestra mascota.
Este sistema es para algunos el más inofensivo, pero también es el menos efectivo ya que algunos perros terminan acostumbrándose al producto llegando a ignorarlo por completo. Otro de los inconvenientes de este producto es que este spray integrado es limitado y periódicamente deberemos substituirlo por uno nuevo, y sucedería como en el apartado anterior, dependeríamos del establecimiento que nos suministra el producto o de tener siempre reservas en casa, ya que por sí solo no funcionaría sin el spray.
Por último, cabe mencionar otro detalle interesante sobre la corrección del ladrido excesivo de nuestro perro. Al reprimir el ladrido, el perro no llega al grado de excitación que alcanza cuando sí ladra, es decir, el propio perro al ladrar crea un bucle que hace constante su grado de ansiedad.
Por ejemplo, los perros que sufren de ansiedad por separación, suelen expresar su ansiedad ladrando, aullando o destruyendo objetos cuando se encuentran solos como medio de desahogo, la clave está en que esa ansiedad precisamente no desaparece porque ellos mismos la siguen alimentando al expresarla ladrando. De esta manera, al reprimir el ladrido, acortamos la sensación de ansiedad en el perro, induciéndolo a enfocarse en otro estado de ánimo.
En próximas entradas hablaremos de las principales indicaciones a seguir a la hora de usar estos collares en nuestro perro.
Autor: Lorena García
